Como se ha visto en la sección anterior, el mercado de los videojuegos se divide entre consolas, PC y móviles, aunque están surgiendo nuevas plataformas de streaming que permiten ejecutar los juegos en la nube, reduciendo el coste del hardware a adquirir.
Consolas
Respecto a las consolas, PlayStation y Nintendo continúan dominando el mercado de consolas, mientras que Xbox enfrenta desafíos significativos. En Europa, las ventas de Xbox han caído un 58% en comparación con el año anterior, mientras que PlayStation 5 y Nintendo Switch mantienen su posición de liderazgo (Statista, 2024).



La PlayStation 2 (PS2) sigue siendo la consola de sobremesa más vendida de todos los tiempos, con aproximadamente 160 millones de unidades vendidas. Aunque la Nintendo Switch ha tenido un gran éxito, es poco probable que supere a la PS2 en ventas totales debido a la disminución gradual de sus ventas anuales (Statista, 2024).

PC
Por otra parte, el PC sigue siendo una plataforma muy relevante para jugar. Usar un PC como dispositivo de juego ofrece ventajas respecto a las consolas, como por ejemplo:
- Mayor flexibilidad en la configuración del hardware
- Capacidad de actualización de componentes
- Amplia variedad de títulos, incluyendo exclusivos y juegos independientes
- Potencial para gráficos de alta calidad y rendimiento superior
El gaming competitivo es particularmente prominente en PC, con títulos como League of Legends, que sigue siendo uno de los MOBA más populares y jugados diariamente. Para el gaming competitivo, se buscan PCs capaces de mantener altos y estables FPS (fotogramas por segundo) para garantizar una experiencia de juego fluida y consistente.
Streaming
Otra innovación importante es el streaming de videojuegos. Plataformas como GeForce Now y Xbox Cloud Gaming permiten a los jugadores transmitir videojuegos sin la necesidad de tener hardware potente. Esto ha facilitado el acceso a juegos de alta calidad para usuarios que no poseen consolas o PC de última generación. Sin embargo, el mercado de streaming enfrenta desafíos técnicos, como la latencia y la necesidad de una conexión a internet rápida y estable, especialmente en áreas rurales. A pesar de estas limitaciones, se espera que el streaming se convierta en una tendencia cada vez más popular en el futuro, transformando el mercado de videojuegos al acercarse más al modelo de servicios en la nube.