A la hora de establecer una clasificación entre los diferentes tipos de webdoc existen diferentes clasificaciones que se centran en las características de los mismos, muchas veces debido a las tecnologías disponibles y empleadas en su diseño y ejecución. Sería el caso de Judith Aston y Sandra Gaudenzi (2012), quienes en su pionera investigación sobre el documental interactivo (i-doc) señalan cuatro modos de interacción que permitirían clasificar la mayoría de modalidades de documentales interactivos:
Modo conversacional
El modo conversacional, donde se produce el uso de la tecnología digital para simular un mundo donde el usuario tiene la ilusión de navegar libremente, característica que comparte con los videojuegos. Este tipo de i-doc, que utiliza mundos 3D para ofrecer una experiencia interactiva óptima para el usuario, se presta al modo conversacional porque hace que el usuario esté en una especie de "conversación" con el dispositivo informático. Algunos ejemplos de este tipo de prácticas podrían ser los factual games como Gone Gitmo (Peña, 2007) o Americas Army (Wardynski, 2002).
Modo hipertextual
El modo hipertextual, que se basa en la unión, a modo de base de datos, de diferentes videos. Estos se enlazan a través de hipervínculos, permitiendo una navegación interactiva que atiende a los intereses del usuario, al que se le proporciona un rol exploratorio a través de las opciones que se han predispuesto en el diseño del proyecto. A Moss Landing (Apple Multimedia Lab, 1989), primer trabajo de este tipo, le sucederían Immemory (Chris Marker, 1997) o Inside The Haiti Earthquake (Gibson y McKenna, 2011).
Modo participativo
El modo participativo, que responde a los avances tecnológicos que desembocaron en la Web 2.0. Ya no solo se permite navegar a través de los contenidos de video del webdoc, sino que ahora se puede establecer una relación bidireccional entre los autores digitales y los usuarios. Con el antecedente del MIT Interactive Cinema Group, dirigido por Gloriana Davenport, que en 1990 intentó desarrollar documentales en evolución, no sería hasta 2005, con el incremento del ancho de banda, cuando comenzaron a desarrollarse formas de que el usuario se involucre en la propia textualidad del webdoc, ya sea editando, traduciendo o aportando incluso los videos durante el proceso de creación del proyecto. Lo importante es que el proyecto permanezca abierto a la comunidad y que evolucione integrando el trabajo de esta. Sería el caso del Proyecto Quipu (Maria Court, Rosemarie Lerner, 2015), que incluiría los testimonios de las víctimas del plan de esterilización del gobierno peruano de Fujimori, aportando para ello los audios de sus relatos.
Modo experiencial
El modo experiencial se basa en la difuminación entre las fronteras de lo virtual y de lo real, aprovechando tecnologías como la del Sistema de Posicionamiento Global (GPS) y su integración en un dispositivo tan habitual como el teléfono móvil. Gracias a esto se pueden desarrollar narrativas que se activan al pasar por un cierto tipo de lugares, así como registrar las experiencias de otros usuarios con ciertos elementos geolocalizados, generando diferentes capas de información. También tecnologías como la realidad aumentada, permitirían interactuar con el medio físico a través de la virtualidad de un dispositivo móvil. Sería el caso de 34 North 118 West (Hight, Knowlton y Spellman, 2001), que permitía a las personas caminar por las calles de Los Ángeles armadas con una Tablet PC, una tarjeta GPS y auriculares.
Por su parte, la investigadora Kate Nash (2012) establece que, atendiendo a los patrones de textualidad presente en los webdocs, se pueden distinguir tres estructuras interactivas:
La narrativa
La narrativa, donde el webdoc sigue una estructura que se asemeja a la del documental convencional lineal, con la emocionalidad asociada al desarrollo de los acontecimientos siguiendo el curso de la historia real y potenciando una narrativa basada en la causa/efecto.
La categórica
La categórica, donde, en lugar de optar por la organización temporal de los hechos, se incluye un conjunto de elementos que se muestran de forma simultánea, pero organizados por tema o espacio. Estas unidades suelen ser videos breves, que en sí mismos sí tienen una estructura narrativa.
La colaborativa
La colaborativa, donde los usuarios contribuyen de formas diversas, aportando textos o videos, por ejemplo. Este formato está en crecimiento debido al ir mejorando el acceso de los usuarios a las tecnologías de la información y la comunicación.
Judith Aston y Sandra Gaudenzi (2012) |
Kate Nash (2012) |
|
|
|
|
|
|
|
Fuente: Tipologías de webdocs (Aston y Gaudenzi, 2012; Nash 2012)