Efectivamente, si repasamos novelas o películas de ciencia ficción, las expectativas respecto al impacto de la Inteligencia Artificial son aún mayores de lo que son actualmente: en novelas de Isaac Asimov como "Yo, Robot" o películas como "2001: Una odisea del espacio" o "Matrix" vemos un mundo donde la IA no solo es omnipresente, sino que tiene una profundidad casi humana. Eso nos hace pensar que, en nuestra imaginación, priorizamos el drama y las grandes cuestiones filosóficas sobre los límites de la tecnología.
