El avance de la sociedad en materia tecnológica es una realidad que es extensible en diferentes ámbitos de la vida, entre los que también se encuentra el educativo. Especialmente, en materia educativa, las Tecnologías de la información y la comunicación (TIC) se han asentado y expandido para la realización de las diferentes tareas educativas (Área, Hernández y Sousa, 2016). En los últimos años gracias a la inmersión tecnológica que ha tenido lugar en el sistema educativo, son cada vez más los diferentes enfoques metodológicos activos que incorporan la tecnología en sus dinámicas formativas (Gómez-García et al, 2020).
Hoy en día, la gamificación se presenta como una de las metodologías caracterizadas por conseguir mejorar la motivación de los estudiantes, conseguir recuperar el interés hacia el proceso de enseñanza-aprendizaje e incrementar el rendimiento académico de los estudiantes (Carpintero, 2017).
Este enfoque metodológico toma como base la utilización de mecánicas, elementos y técnicas de diseño de juegos en contextos no lúdicos para involucrar a los usuarios y resolver problemas (Werbach y Hunter, 2012). Por lo tanto, toma como base la utilización de elementos de diseño de videojuegos ajustados en contexto educativo que no se caracterizan por ser específicamente del juego, con el fin de incentivar un proceso de aprendizaje divertido, atractivo y motivador (Ortiz, Jordán y Agredal, 2018).
Los fundamentos que sustentan a esta metodología están basados en las dinámicas, la estructura implícita del juego, es decir, los procesos que provocan el desarrollo del juego; la mecánica, que hace referencia a las reglas o normas de funcionamiento de la herramienta y; los componentes: las implementaciones específicas de las dinámicas, como es el caso de los avatares, insignias, puntos obtenidos, misiones, barras de progreso, tablas de clasificación, etc. (Gil-Quintana y Casillo-Valero, 2018). Entre las principales características de esta metodología se encuentran las siguientes (Cornejo, Agreda y Caguana, 2021):
- La base del juego: donde se encuentra la posibilidad de jugar, de aprender, y la existencia de un reto que motive al juego. Se debe, a su vez, hacer hincapié en la instauración de unas normas de juego, la interactividad y el feedback.
- Mecánica: la incorporación de niveles, insignias como recompensas. De esta manera, se fomenta el sentimiento de superación.
- Estética: El uso de imágenes gratificantes a la vista del jugador.
- Idea del juego: A través de estas mecánicas de juego, el jugador va recibiendo información, en ocasiones perceptibles solo por su subconsciente.
- Promover el aprendizaje: la gamificación incorpora técnicas para fomentar el aprendizaje.