El método estándar para diagnosticar una infección activa es la identificación de microfilarias en un frotis de sangre mediante examen microscópico. Las microfilarias que causan la filariasis linfática circulan en la sangre durante la noche (llamada periodicidad nocturna). Dado que la parasitemia puede fluctuar, es posible que se necesiten múltiples frotis. Estos se pueden tomar en intervalos de 8 a 12 horas durante 2 a 3 días. Las microfilarias exhiben una marcada periodicidad dependiendo de la especie involucrada, por lo que el momento de la recolección de muestras es crítico. Si se sospecha una infección por filarias, el momento óptimo de recolección para demostrar las microfilarias es:
- Loa loa—mediodía (10 AM a 2 PM).
- Brugia o Wuchereria: por la noche, después de las 8 PM.
- Mansonella—en cualquier momento
- Onchocerca—en cualquier momento
Las diferencias morfológicas para una correcta clasificación de las distintas filarias objeto de estudio se basan en sus estructuras morfológicas (figura 13): vaina (que proviene de la cubierta del huevo que se alarga para dar cabida al embrión, y se retiene como una vaina delgada y flexible), cápsula cefálica, forma de gancho o no de la cola y células o núcleos somáticos (distribuidos a lo largo del cuerpo y con capacidades para la división y formación de estructuras en los siguientes estadíos) y sus diferencias en periodicidad diurna o nocturna.

Figura 13. Clasificación de filarias dependiendo de características morfológicas y biológicas. Figura tomada de https://donostilab.wordpress.com/2018/08/07/microfilarias-en-sangre-periferica/ (adquirida a su vez de Diagnóstico diferencial de las filarias. Werner Louis Baruch. Parasitología Humana)